martes, 5 de noviembre de 2019

LA EPOPEYA DE GUILGAMESH




Mesopotamia significa "sitio en medio de ríos" en griego, y así se llamaba a los valles del Éufrates y del Tigris, en el actual Irak. Allí, alrededor de 2500 a.C., florecía la cultura súmero-acadia, con ciudades autónomas gobernadas por reyes. En ese contexto aparece la Epopeya de Guilgamesh, la obra literaria más antigua que se conserva.

Fuente:

Rabinovich-Berkman, Ricardo D., Principios generales del derecho latinoamericano, Buenos Aires, Astrea, 2006.

Texto de la Epopeya de Guilgamesh:


Rabinovich-Berkman, Ricardo D., "El “Ciclo de Guilgamesh” y las primeras ideas sobre los límites al poder legítimo", en Pensar en Derecho n° 2, Buenos Aires, 2013.

martes, 15 de octubre de 2019

CÓDIGO DE HAMURABÍ



Casi un milenio más tarde, hacia 1700 a.C., en la Mesopotamia siguen estos criterios. De esa época poseemos una gran piedra negra, con varios preceptos del rey Hamurabí de Babilonia (tradicionalmente se la llama Código de Hamurabí). En ella se ve al rey de pie, vestido sencillamente, reverenciando al dios solar, que está sentado en un trono.

Fuente:

Rabinovich-Berkman, Ricardo D., Principios generales del derecho latinoamericano, Buenos Aires, Astrea, 2006. 

Texto del Código de Hamurabí:



EL LIBRO EGIPCIO DE LOS MUERTOS




Las imágenes de las tumbas y de los "papiros de los muertos" muestran a los dioses alrededor de una balanza, donde la diosa Maat encargada de la Verdad y la Rectitud con la forma de una pluma, está en un platillo y en el otro el corazón del muerto.

Fuente:

Rabinovich-Berkman, Ricardo D., Principios generales del derecho latinoamericano, Buenos Aires, Astrea, 2006.

Texto de El libro egipcio de los Muertos:



domingo, 22 de septiembre de 2019

ANTÍGONA




En ese contexto, la creencia en los parámetros metafísicos de conducta aparece también en Grecia, si bien con características propias. Se la detecta ya en las obras atribuidas a Homero y Hesíodo, pero en la literatura del siglo V a.C. se hace evidente con más claridad y profundidad. Atenas, dada a reflexionar sobre la naturaleza de las cosas, se detiene especialmente en estas cuestiones. No sólo en las obras filosóficas, sino también en las teatrales, especialmente tragedias, como la Antígona de Sófocles (c. 496-406 a.C.), escritor, político y militar ateniense, personaje clave del Siglo de Pericles.

Texto de Antígona:

jueves, 12 de septiembre de 2019

LA REPÚBLICA-PLATÓN



El filósofo ateniense Platón (427-347  a.C.), inspirado en las enseñanzas de su maestro Sócrates, cree que, más allá del mundo mutable que percibimos mediante nuestros sentidos, hay otro permanente, compuesto por las ideas, inmutables y perfectas. Los principios superiores se identifican en este filósofo, pues, con esas ideas. El comportamiento humano es mejor cuanto más se aproxime a ellas.

Fuente:

Rabinovich-Berkman, Ricardo D., Principios generales del derecho latinoamericano, Buenos Aires, Astrea, 2006.

Texto de La República, de Platón:

martes, 13 de agosto de 2019

LA POLÍTICA-ARISTÓTELES




El discípulo principal de Platón fue el jonio Aristóteles (384-322 a.C.9, tutor de Alejandro Magno y biólogo. Fue el filósofo más influyente en la Edad Media. Su famosa definición del hombre como "animal político" es un ejemplo de su tendencia a relacionar las conductas humanas con las de los otros animales. Aristóteles criticaba la teoría de las ideas, y sostenía que Platón, al formularla, se había apartado de las enseñanzas de Sócrates. En La política buscó demostrar que las comunidades no pueden construirse a partir de ideas, como proponía Platón en República y Las leyes, sino desde un estudio de la naturaleza humana y la realidad.

Fuente:

Rabinovich-Berkman, Ricardo D., Principios generales del derecho latinoamericano, Buenos Aires, Astrea, 2006.

Texto de La política.

martes, 23 de abril de 2019

DE LA REPÚBLICA-CICERÓN



La base del "ius de gentes", entonces, estaría en la unicidad de la razón. Si ésta es la misma para todo el género humano, y los principios cósmicos son racionales, deben ser también compartidos por toda la humanidad, estarán en cada ser de nuestra especie. Cicerón (106-43 a.C.), destacado jurista y político, expresaba así la idea: "es una ley verdadera la recta razón, congruente con la naturaleza, difusa en todos, constante, eterna, que llama a los hombres al bien por medio de sus mandamientos y los aleja del mal por sus amenazas". Y agrega: "Es nefasto alterar esta ley. No es permitido derogarla con otra ley. Ni mediante el Senado ni mediante el pueblo podemos liberarnos de esa ley".

Fuente:

Rabinovich-Berkman, Ricardo D., Principios generales del derecho latinoamericano, Buenos Aires, Astrea, 2006.

Texto de De la República:

CARLOS TEJEDOR DOCENTE Y CODIFICADOR